El ex presidente peruano Alan García ha fallecido tras haberse disparado en la cabeza cuando iba a ser detenido por orden judicial por supuestos delitos de corrupción vinculados al caso Odebrecht.
"La situación es muy grave", habían señalado en una rueda de prensa tras indicar que García estaba siendo operado y habían conseguido reanimarlo tras sufrir tres paros cardiorrespiratorios.
El director del hospital, Enrique Gutiérrez, explicó que el ex gobernante presentaba un disparo de arma de fuego en el cráneo"con orificio de entrada y salida"y que todos los médicos del Casimiro Ulloa, en el distrito limeño de Miraflores, participaron en la operación.
El suceso se produjo cuando agentes de la División de Investigación de delitos de Alta Complejidad acudieron a la casa del político, sobre el que pesaba desde finales del año pasado una orden de impedimento de salida del país, para someterlo a una detención provisional por diez días ordenada por el Poder Judicial.
La situación legal de García se complicó después de que el pasado domingo se difundiera que la empresa Odebrecht, en el marco del acuerdo de colaboración que mantiene con la Justicia peruana, reveló que Nava, y su hijo José Antonio Nava, recibieron 4 millones de dólares de la empresa para lograr el contrato de construcción de la Línea 1 del Metro de Lima.